Advertencia: Varios desarrollos de la constructora Ruba han reportado fallas graves y falta de atención al cliente. Antes de comprar una vivienda, revisa estos datos y toma precauciones.
Historial de quejas
Reportes periodísticos de diferentes ciudades del país describen un patrón preocupante de problemas en viviendas construidas por Ruba:
- Coahuila: En Villas San Ángel (Torreón), los vecinos denunciaron hundimientos, cuarteaduras y humedad; la empresa hace reparaciones superficiales y no soluciona los asentamientos[1].
- Baja California: En Verona Residencial (Tijuana) se registraron grietas, bardas a punto de colapsar y filtraciones que inundaron viviendas; los habitantes aseguran que Ruba “cumple a medias” y usa materiales de baja calidad[2]. Profeco recibió al menos seis quejas formales de este fraccionamiento[2].
- Coahuila: En el fraccionamiento Arezzo (Torreón) la barda perimetral prometida nunca se construyó; zonas de descarga de agua fallan y las casas nuevas tienen goteras y hundimientos[3]. Vecinos colgaron lonas con mensajes de inconformidad por el incumplimiento[3].
- Querétaro: En Rincones del Marqués, residentes reportaron que la desarrolladora nunca avisó que vivían junto a una presa y que existen cuerpos de agua estancados tras sus muros[4].
Estos antecedentes muestran que los problemas no son aislados. Es recomendable investigar a fondo cualquier proyecto de Ruba antes de firmar un contrato.
Por qué debes tener cuidado
No se trata de alarmar por alarmar: la legislación mexicana establece garantías y obligaciones que muchas veces no se respetan. Ten presente lo siguiente:
- Garantías obligatorias: La Profeco exige mínimo 5 años de garantía por defectos estructurales y 3 años por impermeabilización[5]. Si persisten defectos graves, el desarrollador debe bonificar el 20 % del precio[5].
- Defectos graves reportados: Desplomes de bardas, filtraciones e inundaciones comprometen la habitabilidad de las casas y requieren reparaciones profundas. En varios desarrollos de Ruba, los vecinos aseguran que no reciben soluciones definitivas.
- Incumplimiento de promesas: En Arezzo, Ruba ofreció una barda perimetral que jamás se construyó[3]. En Tijuana, se prometió resolver las filtraciones pero solo se hicieron reparaciones con materiales de baja calidad[2].
Antes de invertir, exige ver los permisos de construcción, el contrato de adhesión registrado ante Profeco y revisa que la empresa cumpla con la NOM‑247‑SE‑2021.
Recomendaciones para compradores y colonos
- Investiga: Busca antecedentes de la empresa, habla con residentes de otros fraccionamientos y revisa si hay quejas ante Profeco.
- Revisa el contrato: Asegúrate de que las garantías estén claramente establecidas y que el desarrollador esté obligado a reparar y bonificar según la ley[5].
- Documenta todo: Guarda publicidad, folletos y promesas de venta. Estas pruebas son útiles si más adelante necesitas exigir que se cumplan.
- Conoce tus derechos: La NOM‑247‑SE‑2021 y la guía de Profeco sobre inmuebles obligan a los desarrolladores a registrar su contrato y proporcionar información completa sobre el inmueble[6].
- No firmes bajo presión: Si detectas irregularidades, consulta con un abogado o acude a Profeco antes de comprometerte.
Conclusión
Este sitio busca advertir a los compradores y colonos sobre los riesgos de invertir en proyectos de Ruba basándose en hechos reportados. No es un ataque gratuito: son alertas para que tomes decisiones informadas y exijas que se respeten tus derechos.
Si ya vives en un desarrollo de Ruba y enfrentas problemas, documenta cada falla, organiza a tus vecinos y presenta una queja formal ante Profeco. La presión colectiva y la difusión responsable de información pueden marcar la diferencia.